Las lesiones laborales graves pueden provocar a veces cuadros de dolor crónico. Además de provocar limitaciones físicas, las personas con dolor crónico también sufren depresión y ansiedad. Esto dificulta el afrontamiento de la situación y también puede repercutir en la capacidad de la persona para recuperarse del suceso. WebMD explica la relación entre el dolor crónico y la depresión y lo que puedes hacer para afrontarlo.
El primer paso consiste en comprender el tipo de respuesta que suscita el dolor. Cuando una persona siente dolor, es habitual que experimente una serie de emociones, como frustración, irritabilidad y ansiedad. Sin embargo, una vez que cesa el dolor la persona vuelve a su estado de ánimo anterior. Cuando el dolor es continuo, estos sentimientos se manifiestan en trastornos emocionales, que se caracterizan por baja autoestima, problemas para dormir, estrés en la familia, aumento o pérdida de peso, problemas de ira y problemas para regular el estado de ánimo.
Con el tiempo, estos problemas pueden desembocar en otros aún más graves. Al estudiar a personas con dolor crónico y depresión, los investigadores descubrieron que su nivel de dolor en realidad se intensificaba, lo que no hacía sino exacerbar sus síntomas. Las relaciones interpersonales también se ven afectadas, y cuando una persona ya no puede conservar un empleo remunerado debido a lesiones pasadas es probable que la depresión empeore con el tiempo.
Existen tratamientos, pero muchas personas deben tratar distintas facetas de su enfermedad con métodos diferentes. Por ejemplo, la terapia conversacional y los antidepresivos pueden ayudar con los aspectos emocionales de la depresión relacionada con el dolor crónico. También se recomienda algún tipo de régimen de ejercicio, ya que es adecuado para tratar tanto los aspectos físicos como los emocionales relacionados con el dolor crónico. La fisioterapia también puede ser útil, sobre todo si la persona pierde funcionalidad de la parte del cuerpo afectada o le resulta difícil realizar tareas y quehaceres cotidianos.