Las personas que conducen por las calles de San Antonio, Texas, a menudo permanecen en las carreteras una vez que se ha puesto el sol. Una vez que llega la noche, suele haber conductores que se apresuran para reunirse con amigos, vuelven a casa del trabajo o simplemente hacen recados hasta altas horas de la madrugada. El peligro reside en el hecho de que los accidentes de tráfico mortales tienen tres veces más probabilidades de ocurrir de noche que de día, según el Consejo Nacional de Seguridad. Aunque conducir a cualquier hora del día puede ser peligroso, hacerlo de noche supone un riesgo mayor para los conductores de todas las edades. Es importante tener en cuenta estos peligros ocultos y conducir en consecuencia para evitar convertirse en la próxima víctima de un accidente de tráfico. accidente catastrófico.
¿Por qué es más peligroso conducir de noche que de día? En primer lugar, la noche puede reducir la capacidad de una persona para ver con claridad. Los faros brillantes y la falta de luz solar natural pueden dificultar la distinción de la velocidad y la distancia de un vehículo que se aproxima. También puede afectar a la visión periférica de los conductores. Esto es especialmente cierto en el caso de los conductores mayores de 50 años, ya que, según el NSC, este grupo de edad necesita casi el doble de luz para ver que los conductores más jóvenes.
También hay más conductores ebrios en la carretera por la noche que durante el día. Los automovilistas deben extremar la precaución al conducir de noche y estar preparados para reaccionar ante cualquier tipo de comportamiento errático al volante. Las malas condiciones meteorológicas y la conducción distraída también pueden provocar más accidentes por la noche.