Los accidentes automovilísticos ocurren por diversas razones, pero la conducción distraída es particularmente problemática, y muchas vidas se han perdido a lo largo de los años como resultado de la imprudencia al volante. Cuando muchas personas piensan en la conducción distraída, pueden imaginar a alguien usando su teléfono para enviar o leer un mensaje mientras conduce. Aunque el uso del teléfono inteligente es una distracción común, hay muchos otros ejemplos de conducción distraída, algunos de los cuales pueden no parecer tan problemáticos. Por ejemplo, comer alimentos mientras se conduce un vehículo puede ser increíblemente peligroso y muchos conductores han mostrado este comportamiento en un momento u otro mientras estaban en la carretera.
A veces, los alimentos pueden ser especialmente propensos a distraer a un conductor. Por ejemplo, los alimentos que están muy calientes o tienen un envoltorio complicado pueden hacer que alguien desvíe su atención de la carretera y sus manos del volante, lo cual es una muy mala idea. Incluso alimentos sencillos, como pequeños tentempiés, pueden ser una fuente de distracción, y es importante que los conductores se den cuenta de que desviar la atención de la carretera durante unos segundos puede aumentar significativamente las probabilidades de sufrir un accidente, que puede resultar mortal.
Mientras conduce, es extremadamente importante evitar cualquier distracción que pueda desviar su atención. Muchas personas comen mientras conducen porque tienen poco tiempo o mucha hambre, pero no merece la pena si comer provoca un accidente con pérdida de vidas o lesiones graves.
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